La historia

 

 

 

 

 

 

 

 

Consuelo Loro Mayoral nació en Logrosán el 15 de Septiembre de 1925 hija de Eugenio y María.

Eugenio había emigrado a La Argentina en la década de los 10 y a su vuelta abrió al público en Logrosán la que sería afamada Fonda Loro.

Aún en tiempos convulsos, el negocio familiar gozó durante años de la prosperidad suficiente para que Eugenio y María enviaran a su hija mayor a Madrid para cursar los estudios de bachillerato el curso 1935/36 en el Instituto Lope de Vega.

El final de este primer curso coincide con el inicio de la guerra civil, lo que hace cambiar los planes realizando el resto del bachillerato elemental en el Instituto de Cáceres durante los casi tres años de la guerra, de 1936 a 1939.

En los cursos académicos 39/40, 40/41 y 41/42 acude al Colegio Paideuterion también en Cáceres donde supera los cursos 5º, 6º y 7º de Bachillerato que le abren la puerta para en 1944, tras superar el Examen de Estado, obtener el título de Bachiller Universitario por la Universidad de Salamanca.

Se desplaza a Burgos donde prepara las oposiciones para la obtención del título de Maestra Nacional, hecho que ocurre el 31 de enero de 1946.

De 1947 a 1949 ejerce interina en el Pago de San Clemente (adscrito al Ayuntamiento de Trujillo).

El 18 de Abril de 1949 es nombrada Maestra Propietaria en la Escuela Nacional de Primera Enseñanza de Villoviado, perteneciente al Ayuntamiento de Lerma (Burgos).

En Septiembre de 1951 comienza a ejercer en Alía donde permanece los cursos 51/52 y 52/53.

Los cursos de 1953 hasta 1958 ejerce ya en Logrosán en las Escuelas Parroquiales.

Desde 1958 ejerció de forma continuada en Las “Escuelas Nuevas” de Logrosán hasta el 15 de Septiembre de 1990 en que se jubiló.

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Consuelo tuvo una maestra en su propia casa. Su madre, María  Mayoral,  era quien gobernaba  la cocina  de la Fonda Loro. Y  María no era una cocinera cualquiera. Una crónica  sobre aquella época decía:

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"Era la Fonda de los viajantes importantes, que alababan aquellas comidas, famosas  en toda Extremadura. Perdiz por barba en tiempo de caza; ancas de rana, algún lagarto, criadillas de tierras, espárragos trigueros y salsa del mes. Los viernes, potaje, exigido al parecer por la iglesia. La señora de Loro pagaba una bula especial, para que pudieran comer carne en Cuaresma sus clientes."

 

Consuelo heredó esa sabiduría de su madre  y la paciencia y la pulcritud de su padre . Haciendo uso de  ambas cualidades recopiló estas RECETAS  ÚTILES que aquí comparto.